domingo, 31 de enero de 2010

La canción de Brian

Brian va hacia el infierno. Camina decididamente, sin mirar cuando cruza la calle, sin reparar en la mujer de rojo que le guiña un ojo. Cojea levemente, pero sabe como caminar para que en vez de una debilidad parezca una nota más de glamour en su ya de por sí glamouroso porte. Se enciende un pitillo y sigue avanzando, mientras deja un rastro de humo y elegancia. Llega a la puerte del infierno, no hay nadie a su alrededor, la abre y entra.

Suena:
http://www.youtube.com/watch?v=lSptPm1C1nM

PD: Debo estudiar, mañana si no lo hago será peor que la vez que me redujeron la cabeza los tupinamíes en el Amazonas.

viernes, 29 de enero de 2010

La canción de Alexandros

Hoy se me ha aparecido Alejandro Magno al abrir la nevera. Para mucha gente esta sería una situación bastante extraña, pero estoy acostumbrado a este tipo de cosas raras. Era un Alejandro en miniatura, de la altura del yogur de frutos del bosque. Ha levantado el escudo y en este se veía la hora. Era un escudo Casio. No ha dicho nada, tan sólo se ha quedado allí, en posición defensiva, con el escudo-reloj guareciéndole mientras que con la otra mano sostenía su espada. He cogido el quinto (motivo por el cual había acudido al frigorífico) y he cerrado la nevera. Por lo menos Alejandro no morirá de inanición.

Por otro lado, me encata la palabra Escohotado. Y si algún listillo se atreve a decir que es un apellido, le recuerdo que un apellido también es una palabra. Fastidiate Flanders.

jueves, 28 de enero de 2010

La canción de John Spencer (capítulo primero)

John Spencer creció en una granja de Ohio. Sus padres, neoadventistas del séptimo círculo, le educaron en casa, ya que no podían tolerar las terribles enseñanzas a las que se veían sometidos todos los que asistían a la Escuela. John vivía tranquilo y feliz, sabiendo que su religión estaba dentro del tratado especial de no escolarización para religiones y creencias del Gobierno Mundial. Es decir, no se vería sometido al examen de Finalización y viviría una existencia plácida en su granja. El problema surgió cuando en el año 2156, un grupo de neoaventistas del séptimo círculo puso una bomba en una Escuela y murieron 1543 personas. Las represalias del Gobierno Mundial ante tal matanza no tardaron en llegar. Lo primero fue incluir a los neoadventistas en la lista de sectas peligrosas, junto al catolicismo, el islam o el judaísmo. Eso excluía a la religión de John del tratado de no escolarización. Y para más inri, John tenía 17 años, la edad en que todos los escolares se someten al examen de Finalización. El chico enseguida se dio cuenta de que, dada su total ignorancia sobre las temáticas tratadas en la Escuela, suspendería el dichoso examen. Y suspender el examen suponía la Estratoficancia.

La Estratoficancia fue una pena que el Gobierno Mundial implementó fruto de dos necesidades. La primera era castigar a aquellos individuos que no habían pasado por la Escuela, ya que eso suponía un ataque al bien común. La otra, era la falta de individuos que quisiesen trabajar en las centrales de fusión que orbitaban alrededor del planeta. Debido a que el sistema daba total libertad a la gente para realizar el trabajo que eligiesen, pocas personas estaban dispuestas a abandonar la comunidad y vivir recluidas dando vueltas a la Tierra. Pero gracias a la Estratoficancia, pudieron eliminar dos problemas de una tajada.

Así fue como John Spencer, a la edad de 18 años, se subió al transbordador y con lágrimas en los ojos se despidió de sus padres y de su granja. Aunque a medida que iba viendo como se empequeñecía el mundo, en su interior sintió cierto alivio de abandonar ese lugar infestado de personas descreídas y pecadoras.

miércoles, 27 de enero de 2010

La canción de James

Primero: en la biblioteca hoy sí que hay chicas monas. Veo que esto de escribir quejas en el blog tiene sus frutos.

Segundo: exisitió una forma de esclavismo en EEUU después de la Guerra Civil. Estaba basada en juzgar a negros por pseudodelitos (como la vagancia, cuestión harto conocida en España) y, hacerles pagar las costas del procedimiento mediante el trabajo no remunerado en minas, granjas, etc. Esta práctica fue común hasta la Segunda Guerra Mundial.

Tercero:
-Tira la pistola de agua James.
-¡Nunca!
-He dicho que tires las pistola de agua James.
-Vale...

James creció y ahora es unpseudo hippi de mierda que vota a ICV.

Tengo The only One I Know de los Charlatans en la cabeza:
http://www.youtube.com/watch?v=zhSA8FwdS2A

martes, 26 de enero de 2010

Canción de Lucy

-Lucy, mejor para.
-¿Por qué? ¿No lo estoy haciendo bien?
-No, es que debo confesarte algo...
-¿Qué?
-Lamerme el escroto no te curará el sida.

lunes, 25 de enero de 2010

La canción de Packard y Bell

Las bibliotecas son lugares donde los estudiantes van a ligar. Menos en la que estoy. Vaya mierda. No es que mi intención primaria al ir a la biblioteca sea ligar, pero me jode sobremanera que no ofrezca esa posibilidad. La institucionalización de los servicios es total en la misma, felicidades señora rectora, ya que se ha eliminado un servicio que se ofrecía de manera espontánea y sin ningún tipo de control por parte de las autoridades competentes. No lo había pensado de esta manera, y ahora me jode aun más que no se pueda ligar.

Además uso Spotify y suenan anuncios horribles. Ya sé que si pago no los tendría que escuchar. Pero igualmente me jode. Enserio, la publicidad es algo horrible. Ya hablaré de lo horrible que es algún día.

Ahora estudiaré.

Suena: And Then She Smiles-The Mock Turtles